Deshidratar hierbas en el horno es una excelente manera de conservar su frescura y sabor para usar en recetas durante todo el año. Este método simple y eficaz te permitirá disfrutar de hierbas aromáticas incluso cuando no están en temporada. A continuación, te mostraremos paso a paso cómo deshidratar hierbas en el horno de forma fácil y práctica.
Preparación de las hierbas frescas
Paso 1: Selecciona las hierbas adecuadas
Antes de comenzar el proceso de deshidratación, es fundamental elegir hierbas frescas de alta calidad. Opta por hierbas recién cosechadas y asegúrate de que estén limpias y libres de cualquier suciedad o residuos. Las hierbas como el romero, tomillo, orégano, albahaca y menta son excelentes opciones para deshidratar en el horno.
Paso 2: Lava y seca las hierbas
Lava suavemente las hierbas frescas bajo agua fría para quitar cualquier resto de tierra. Una vez lavadas, sécalas completamente con papel de cocina o un paño limpio. Es importante asegurarse de que las hierbas estén totalmente secas antes de continuar con el proceso de deshidratación.
Paso 3: Retira las hojas de los tallos
Despoja las hojas de las hierbas de los tallos, ya que los tallos tienden a contener más humedad y pueden afectar el proceso de deshidratación. Descarta los tallos y utiliza solo las hojas para obtener mejores resultados.
Paso 4: Prepara una bandeja para hornear
Forra una bandeja para hornear con papel pergamino o un tapete de silicona para evitar que las hierbas se peguen. Distribuye uniformemente las hojas de hierbas sobre la bandeja, asegurándote de que no se superpongan para permitir una deshidratación adecuada.
Proceso de deshidratación en el horno
Paso 5: Precalienta el horno
Prepara tu horno y ajústalo a una temperatura baja, generalmente alrededor de 50°C a 70°C. Es importante mantener una temperatura baja para deshidratar las hierbas de manera uniforme sin quemarlas.
Paso 6: Hornea las hierbas
Coloca la bandeja con las hierbas en el horno precalentado y deja que se deshidraten lentamente. El tiempo de horneado variará según el tipo de hierba, pero generalmente toma alrededor de 1 a 2 horas. Asegúrate de revisar las hierbas de vez en cuando para evitar que se quemen.
Paso 7: Pón a prueba la sequedad
Para verificar si las hierbas están completamente deshidratadas, retira una hoja del horno y aplástala entre tus dedos. Debería desmoronarse fácilmente, lo que indica que está lista para almacenarse. Si las hierbas aún están flexibles, vuelve a colocarlas en el horno durante unos minutos adicionales.
Almacenamiento y uso de hierbas deshidratadas
Paso 8: Enfría y almacena las hierbas
Una vez que las hierbas estén completamente deshidratadas, retira la bandeja del horno y déjalas enfriar a temperatura ambiente. Luego, trasládalas a frascos de vidrio herméticos y guárdalas en un lugar fresco y oscuro para preservar su sabor y frescura.
Paso 9: Utiliza tus hierbas deshidratadas
Ahora que has deshidratado tus hierbas con éxito, puedes usarlas en una amplia variedad de recetas. Agrega tus hierbas deshidratadas a sopas, guisos, aderezos, salsas, marinadas y más para darles un toque de sabor fresco y aromático en cualquier época del año.
¿Puedo deshidratar diferentes tipos de hierbas juntas en el mismo proceso?
Sí, puedes deshidratar varias hierbas juntas en el mismo proceso, siempre y cuando tengan tiempos de cocción similares. Agrupa hierbas con perfiles de sabor compatibles para obtener los mejores resultados.
¿Cuánto tiempo duran las hierbas deshidratadas?
Si se almacenan correctamente en frascos herméticos y en un lugar fresco y oscuro, las hierbas deshidratadas pueden durar hasta un año sin perder su sabor y aroma.